viernes, 30 de julio de 2010

Pasamos de Honduras a Nicaragua

Nuestro paso por Honduras fue breve, pero enriquecedor. Pasamos la primer noche en un hostal en Omoa, playita cerca de la frontera con Guatemala. Era casi el atardecer cuando llegamos, las sombras se alargaban sobre las tranquilas aguas del Caribe.


Luego de dejar nuestras cosas en este hostal de primera (muy bueno de verdad y por $180 Lempiras, mangos maduros cayendo de un gran árbol incluídos sin costo extra) fuimos a pasear por el muelle y ver dónde se podia tocar música. Los restaurantes estaban vacíos, pero había mucha gente pescando con anzuelos y con el disco dorado del sol cayendo hacia el mar. Me pareció un momento y lugar perfectos para acompañar con algo de muasica. Empecé con La leyenda del Beso (versión de partiturta que ya me sale bien!) y luego Bésame mucho. Claro, los primeros en acercarse fueron una pareja de enamorados, luego algunos niños mientras sus abuelos jalaban el anzuelo pero miraban de reojo o tarareban la cancion. Otro momento de película.


Cenamos y conocimos las Baleadas, torillas de harina doraditas con frijolitos, quesito y cremita. Un buen cafe y compramos uns cigarros Belmont, previa prueba de algunos sueltos de otras marcas. Sobre ese día les escribi en la nota anterior y sobre nuestra llegada con Jorge Virgilio a quien egradecemos mucho su hospitalidad y le desemos que su vida de muchos frutos como los mangos del hostal de Omoa.

En Tegucigalpa esperábamos ser hospedados por 2 couchsurfers, pero ambos tuvieron visitas y no pudieron hospedarnos. Nos quedamos en un hostal en el centro que , aunque no nos devoraron los mosquitos y no estaba sucio, sí estaba muuuy humedo y un poco triste. La ciudad también. Honduras es en general muy espaciosa, las casas son la típica imagen de cuando niño nos enseñan a dibujar casitas y las hacemos de 2 aguas, con teja roja, puerta y ventanitas pintorescas; pues asi son las casas en Honduras... excepto en Tegus. Tegus está apretada, tensa, un poco descuidadita yo diría. Ya luego un taxista nos explico que hay muchas fugas de dinero por corruptelas y por ello no se da mantenimiento a la ciudad ni empleo a sus habitantes. Él como muchos, etsa convencido de que una nueva Constituyente, un cambio drástico y pacífico, una forma diferente de actuar e imaginar Hoduras son necesarias y tan posibles que ya se están articulando y un murmullo se escucha si uno pone atención.

Yo estoy de acuerdo con eso Para el Mundo... y Ustedes?

1 comentario:

  1. La ultima, y unica, vez que estuve en Honduras me parecio que la gente tiene el animo para hacer que su pais sobresalga. Desafortunadamente su seleccion perdio los dos partidos y eso los dejo desanimados. Esperemos que ahora retomen ese espiritu de cambio.

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